Las galletas son de esas elaboraciones culinarias súper agradecidas porque no demandan mucha implicación, tiempo ni esfuerzo. Una vez que das con una receta de base luego puedes divertirte sustituyendo algunos elementos, frutos secos... Es lo que suelo hacer con mis cookies de avena, chocolate y macadamia, a veces pongo avellanas, almendras, pasas o arándanos rojos secos en vez de chocolate...
También tengo por el blog estas galletas de jengibre tan bonitas que seguramente volveré a hacer pronto ya que se acerca la navidad y a mí me huelen y saben a época festiva.
Tenía ganas de probar con nuevos sabores y también texturas y al final tras varias pruebas acabé con esta combinación de manzana y coco. En la última tanda hice tantas que comimos galletas de manera incesante durante muchos días. Galletas por aquí, galletas por allá.
Lo bueno es que son caseras, sin aditivos difíciles de nombrar ni ingredientes de dudosa calidad y así, da gusto comerlas. Si usas manzanas ecológicas puedes rallarlas con piel, si no, es preferible pelarlas para evitar todos los pesticidas y ceras que suelen llevar.
Como verás con las cantidades indicadas saldrán unas 30 galletas, si quisieras hacer menos, solo debes usar la mitad de ingredientes. En este caso hice las formas con cortadores de galletas redondos y después usando este sello "home made" que queda tan chulo.
Rara es la vez en que haga un postre y no use alguna especia. Bueno en realidad no solo en postres, más bien en todas mis recetas. :D Y como no iba a ser menos, en esta uso canela y anís estrellado. El otro día compartía en Instagram la foto de unas ramas de canela, es una especia que a mí me apasiona. Tanto en platos dulces como salados. Si, salados también, como en esta crema de calabacín a la que le da un toque genial; en la pastela marroquí...qué delicia, o el curry Massamán tailandés en el que no puede faltar.
Cuando viajé a Vietnam, vi por primera vez canela recién sacada del árbol en plena selva y me impresionó. Es una corteza interna que se retira del árbol cinnamomun, que se deja secar y después se enrolla en palitos a modo de cañitas, y también se vende tal cual la corteza en trozos enteros. Así fue la que vi allí y la que me trajeron una vez de la India, a primera vista es un trozo de madera o corteza simple pero que según cortas un trozo con tus manos desprende un aroma increíble e intenso. Estas cortezas después se secan y muelen para producir la canela en polvo.
Ahí descubrí la diferencia con la canela en polvo que solemos comprar, la de rama tiene muchísimo más aroma, sabor y dura mucho más, y al igual que el resto de especias, que es mejor comprarla en grano, la canela si quieres disfrutar de un sabor y olor intenso, siempre mejor en rama, y se puede moler en mortero o molinillo eléctrico.
Pues después de divagar y perderme un poco en el mundo de las especias... aquí va mi recetilla de galletas de manzana y coco, sin gluten ni lácteos y con opción vegana.
RECETA DE GALLETAS DE MANZANA Y COCO
INGREDIENTES (Para 30 galletas)
- 1/2 cup/taza de harina de almendras (o almendras molidas)
- 1 cup/taza de harina de arroz integral
- 1/2 cup/taza de coco rallado
- 2 manzanas rojas ralladas
- 1/2 cup/taza de panela o azúcar de coco
- 1/4 de cucharadita de sal
- 1/2 cucharadita de bicarbonato de sodio
- 2 cucharadas de lino molido+ 4 cucharadas de agua (remojo unos minutos) o 2 huevos
- 2 cucharadas de aceite de coco bio, líquido
- 1 cucharada de canela en polvo
- 1/2 cucharada de anís estrellado en polvo
ELABORACIÓN
- Precalienta el horno a 180ºC.
- Ralla las manzanas y cuela el líquido, no lo tires! es un zumo bien rico :)
- Mezcla todos los ingredientes húmedos: manzana + lino en remojo + aceite de coco.
- Añade los ingredientes secos: harina de almendra y de arroz + coco rallado + panela + sal y bicarbonato + canela y anís estrellado y mezcla todo bien.
- Prepara una bandeja de horno con unos tapetes de silicona (como estos) o papel de hornear.
- Moldea las galletas a tu gusto y coloca en la bandeja.
- Hornea 28-30 minutos, vigila que no se quemen.
- Saca del horno y deja enfriar en la rejilla 10 minutos.
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